Les quiero contar una historia que es verdadera, no es sacada de un libro, simplemente es algo que viví y esperimente en mi niñez:
Cuando uno es un niño (de tres o cuatro años) todo es felicidad, así pasen necesidades o tengan los padres más malos del mundo, porque los niños, son solo eso, niños inocentes . Pero cuando les van pasando los años y dejan de ser niños, dejan de ver las cosas como si fueran cuentos de hadas y empiezan a percibir la realidad de las cosas, sentir tristezas, angustias, decepciones, y sus pensamientos se convierten en tener solo sueños y anhelos, tener unos padres que los quieran mucho y no los maltraten, tener una comida rica con carne, pollo, muchos dulces, algo tan sencillo como ir a piscina, ir a río, tener ropa y zapatos, ir al colegio, tener los mejores juguetes en navidad, tener sus útiles y hasta trabajar.
¿Por que creen que los niños de los semáforos se levantan todas las mañanas con ganas de ir a trabajar? por que en esa esquina tienen comida, juguetes y se sienten queridos por aquellas personas que paran sus carros para darles algo, entonces empiezan a sembrar en sus corazones una esperanza de salir adelante y muchos de ellos se lo van creyendo por que esperan que sus sueños se hagan realidad pero desafortunadamente muy pocas veces se les realizan por que no tiene el apoyo de alguien, ahí es donde viene mucho dolor para ellos, desesperanza, tristeza por no poder ver realizados sus sueños.
y saben ustedes, donde van a parar estos niños?? en unos jóvenes llenos de resentimientos, en las drogas y hasta en contra de Dios, esta es la cadena que siguen generación tras generación.
Tengo la firme convicción que puedo ayudar a muchos de ellos a través de instituciones, colegios, ONG, a través del deporte, la cultura y con mi comedor donde no vuelvan a sentir hambre y donde crean firmemente que sus sueños si se pueden realizar.
Cuando uno es un niño (de tres o cuatro años) todo es felicidad, así pasen necesidades o tengan los padres más malos del mundo, porque los niños, son solo eso, niños inocentes . Pero cuando les van pasando los años y dejan de ser niños, dejan de ver las cosas como si fueran cuentos de hadas y empiezan a percibir la realidad de las cosas, sentir tristezas, angustias, decepciones, y sus pensamientos se convierten en tener solo sueños y anhelos, tener unos padres que los quieran mucho y no los maltraten, tener una comida rica con carne, pollo, muchos dulces, algo tan sencillo como ir a piscina, ir a río, tener ropa y zapatos, ir al colegio, tener los mejores juguetes en navidad, tener sus útiles y hasta trabajar.
¿Por que creen que los niños de los semáforos se levantan todas las mañanas con ganas de ir a trabajar? por que en esa esquina tienen comida, juguetes y se sienten queridos por aquellas personas que paran sus carros para darles algo, entonces empiezan a sembrar en sus corazones una esperanza de salir adelante y muchos de ellos se lo van creyendo por que esperan que sus sueños se hagan realidad pero desafortunadamente muy pocas veces se les realizan por que no tiene el apoyo de alguien, ahí es donde viene mucho dolor para ellos, desesperanza, tristeza por no poder ver realizados sus sueños.
y saben ustedes, donde van a parar estos niños?? en unos jóvenes llenos de resentimientos, en las drogas y hasta en contra de Dios, esta es la cadena que siguen generación tras generación.
Tengo la firme convicción que puedo ayudar a muchos de ellos a través de instituciones, colegios, ONG, a través del deporte, la cultura y con mi comedor donde no vuelvan a sentir hambre y donde crean firmemente que sus sueños si se pueden realizar.